DEFENSA PERSONAL POLICIAL

La Defensa Personal Policial es una herramienta fundamental para garantizar la seguridad de los Agentes del Orden y la protección de la sociedad. A través de su práctica, se fortalece la capacidad de respuesta ante situaciones críticas, asegurando actuaciones eficaces, proporcionadas y ajustadas a la legalidad.

• Mayor Seguridad Personal: Técnicas especializadas para protegerse y controlar situaciones de riesgo.
• Confianza y Control: Desarrolla habilidades para actuar con precisión bajo presión.
• Actuación Profesional: Respuesta ajustada a la legalidad, minimizando el uso de la fuerza y garantizando los derechos fundamentales.

• Intervenciones Más Seguras: Reducción de riesgos en situaciones críticas para ciudadanos y agentes.
• Respeto a los Derechos Humanos: Técnicas proporcionadas que garantizan una actuación ética y responsable.
• Mayor Tranquilidad Pública: Agentes preparados generan un entorno más seguro y confiable.

La formación en Defensa Personal Policial combina conocimientos de diversas disciplinas para una actuación integral y eficaz:

• Artes Marciales Aplicadas: Adaptación de técnicas de disciplinas como el Judo, Jiu-Jitsu, Karate entre otras.
• Técnicas de Detención y Conducción: Procedimientos para reducir, engrilletar y trasladar a personas de manera segura.
• Gestión de Conflictos: Habilidades para controlar situaciones con la mínima intervención física necesaria.

Una preparación constante es clave para mantener la eficacia y la seguridad en el desempeño policial, como determinan las diferentes normas policiales. La actualización en técnicas y procedimientos garantiza una respuesta ajustada a los nuevos desafíos de la seguridad pública.

En un entorno cambiante, la Defensa Personal Policial no solo protege al agente, sino que fortalece la confianza de la sociedad en sus cuerpos de seguridad.